martes, 3 de noviembre de 2009

Aparecen vertidos tóxicos en la playa de El Perelló.



El pasado 2 de Noviembre, se pudo ver en la playa del Perelló, perteneciente a la provincia de Sueca, un vertido de sedimentos del dragado procedente del puerto del Perelló. La arena, junto con los sedimentos anóxicos acumulados en el puerto, se vertió a una playa de uso público.

Según los testigos, el agua presentaba aceite y gasoil, y desprendía malos olores, lo cual es lógico teniendo en cuenta la procedencia de las mismas. Esta situación genera malestar entre los vecinos y al mismo tiempo es un peligro tanto para los bañistas (en esta época del año, los surfistas) como para el medio marino.
El problema de esta práctica radica en la metodología empleada, basada en hacer un agujero en la playa donde se vierten los sedimentos procedentes del puerto, para más tarde, cuando ya ha finalizado el proceso de dragado, proceder a un reparto por la playa con el objetivo de “aplanar” la montaña de árido. Las consecuencias de este tipo de práctica ilegal son muchas, y van desde una modificación en la dinámica natural de la playa hasta contaminación del bentos (fauna que vive sobre el sustrato), pasando por malestar entre pescadores, surfistas y vecinos. Además se puede ver como las aguas frente a la zona de actuación se tornan sucias y con aceites. En alguna ocasión incluso los surfistas se han visto obligados a salir del agua por la angustia y malestar que les producían los olores de la misma.
Este tipo de materiales necesita un análisis para poder realizar el tratamiento adecuado. Lo que está claro, dadas las características del vertido y en base a las categorías del RGMD (Recomendaciones para la Gestión del Material Dragado), es que dado que el material no es inocuo (la presencia de aceites y de gasoil produce una grave contaminación) se necesita tratar el mismo.
La nefasta gestión de las costas por parte de las Administraciones Públicas hace que se vierta directamente el árido, puesto que esto es más económico. El realizar un Estudio de Impacto Ambiental y llevar el material dragado a un vertedero, debería ser la metodología correcta a aplicar. Las Administraciones Públicas, que parecen no ser conscientes del coste ambiental y para la salud humana que tiene el verter este tipo de material sobre la costa, realizan esta nefasta gestión poniendo en peligro al ecosistema marino y a los diversos actores que se ven afectados (pescadores, surfistas, vecinos…)
Este tipo de prácticas se realizan con cierta asiduidad (cada 3 meses según los vecinos de la zona), además el Guarda de Seguridad del Puerto en anteriores ocasiones ha impedido que se fotografíe el dragado para evitar denuncias. Debemos tener en cuenta, además, que actualmente se está proponiendo una ampliación del puerto del Perelló, cuyo proyecto contempla, entre otras cosas, la ampliación de la bocana del puerto, lo que conllevaría un mayor tonelaje de áridos dragados para lograr llegar hasta los 10 metros de calado que prevé el proyecto.

jueves, 29 de octubre de 2009

La manipulación de los medios nos hace vulnerables.

El otro día vi un video sobre el estado de la costa de Dénia, Valencia.

http://www.lasextanoticias.com/videos/ver/el_mar_se_come_denia/200921

Es curioso como el video se centra en el cambio climático y la subida del nivel del mar como los principales culpables del estado de la playa.
Eso es mentira.

La verdad de la situación en la costa de Dénia y en otras muchas costas de españa en general y de la vertiente mediterránea en particular es otra bien distinta.

Desde los años 50 empezamos a construir en la costa, desde los 80 de manera desaforada, muchas construcciones se hicieron encima de dunas. Las dunas son un reservorio natural de arena y esto ayuda, cuando se producen temporales, a reestablecer el equilibrio de la costa.

Además como tener un barco mola, ligada a la construcción desaforada en el litoral, se empezó a construir un gran número de puertos deportivos, hasta 10 cada 100 kilómetros. Claro que para tener un puerto necesito diques y espigones, o también llamados cortes transversales en la dinámica litoral, lo que impide un transporte de áridos.

Una vez tenemos la costa llena de casitas y puertos (deportivos en su mayoría), llega la hora de poder pasear entre la playa y las casas, pero sin mancharnos los pies de arena ni estropearnos los zapatos con el salitre. Construyamos pues paseos marítimos (también llamados por el Ministerio de Medio Ambiente Rural y Marino, mejora de la fachada marítima), a lo que se dedica actualmente el 80% del presupuesto que va dirigido a conservación de la costa.
Una vez tenemos la costa moldeada a nuestra imagen y semejanza nos damos cuenta que ¡la playa se está quedando sin arena!
La solución-parche para unos es tirar arena (total como es dinero que viene de arriba al ser la costa Dominio Público Marítimo Terrestre, qué más da) y se forman así unas regeneraciones de playa millonarias que es básicamente lo más parecido a tirar millones al mar.
La solución para otros es la retirada sostenible de las zonas sensibles, es decir, dejar la costa con sus dunas y reducir el número de puertos, y por tanto, de espigones. Esta solución es mucho más económica a medio y largo plazo, pero como lo que importan son los votos, se desestima por completo.
Pues en esas estamos, diciendo que la culpa de todo la tiene el calentamiento global (que no digo que un aumento de la temperatura no produzca dilatación en el agua y por tanto aumente el nivel medio del mar), pero en este caso la culpa de la costa de Denia la tiene una nefasta política de costas.
Hace muchos años, el 28 de julio de 1988 entró en vigor una ley, llamada Ley de Costas. En España no la cumple nadie (bueno de vez en cuando tiran la casa de una pobre gente que llevaba ahí viviendo toda la vida y cuyas viviendas no afectan en absoluto al equilibrio costero), veáse el Algarrobico en Almería. Pero a esto le dedicaré su página especial.
En fin, que no nos engañen, que las cosas no son como las pintan, aquellos que tanto se quejan son parte del problema, lo peor de todo es que lo saben y nos toman por idiotas.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Arrancar siempre cuesta.

Empezar algo nuevo siempre ilusiona, al mismo tiempo genera cierta tensión. Y uno no sabe como empezar, qué decir, cómo ser original, creativo, innovador y todas esas cosas que cada vez son más difíciles de lograr en la sociedad actual donde lo más fácil es el plagio.

Acabo de crear mi blog, para llevar mi ambiente a tu medio, para encontrarte en la red. Para que me encuentres tú a mi. Para que juntos podamos debatir y para poder conocerte y conocerme.
Porque aquí ni tú tienes cara ni yo tengo nombre.

Aquí ser libre es fácil.

Ser yo es dejar que fluyan mis pensamientos.

Ser tú es tan fácil como un comentario...

Bienvenido a mi ambiente, espero ser tu medio.